sábado, diciembre 12, 2009

El Premio Nobel De La Paz Mas Inmerecido de la Historia: Barack Obama

Teniendo entre sus predecesores a brillantes e incansables pacifistas y activistas políticos y espirituales como el Dalai Lama, Nelson Mandela, Madre Teresa, Martin Luther King, entre otros, el jueves 10 de diciembre fue entregado el Premio Nobel de la Paz al Presidente de los Estados Unidos de America, Barack Obama.

Creo que el mas divergente de los mensajes es el hecho de entregarle el Premio Nobel de la paz al presidente de una nación que constantemente esta en guerra, guerra económica, guerra cultural, una guerra constante por inculcar sus retorcidos fundamentos del nuevo modelo de sociedad consumista, un pais que constantemente esta apuntando sus dedos hacia algun nuevo enemigo. Este premio se dio mayormente basado en sus buenas intenciones y su buena oratoria no en acciones concretas, ya que el se encuentra en las etapas iniciales del gobierno que el aun le falta por enfrentar de lleno, de cierta forma lo veo como un gesto snob o podría ser para comprometerlo con su mensaje de marcar una real diferencia entre él y los demás presidente que han pasado por la Casa Blanca.

Si bien Obama significa un turning point en la forma en que se dirige una super potencia como los Estados Unidos y el primer presidente Afro-Americano de la historia de un país que se jacta por un lado de ser liberal y tolerante, pero que por el otro se azota y ahoga constantemente en sus contradicciones, en su discriminación y doble moral.

Como su fundador Alfredo Nobel lo indicaba en su testamento se debiera entregar a la persona que haya trabajado mas o mejor en favor de la fraternidad entre las naciones, la abolición o reducción de los ejercitos existentes y la celebración y promocion de los procesos de paz. Barack Obama ha dado a este mundo de incertidumbre e inestabilidad política esperanza, se puede decir que hasta ahora a penas le ha dado tiempo de empezar a darle seguimiento a su ambiciosa agenda y lo que hemos percibido de el son sus buenas intenciones, no que no cuenten o que no sea suficiente, pero en un mundo tan conflictivo y dividido por el poder, hace falta mas que una buena intencion para cambiar los resultados.

En su discurso Obama no pudo evitar el hablar de la guerra interminable de su país contra todo aquel que se oponga a su voraz imperialismo, hablo de la paz, hablo de Martin Luther King, hablo de sobre la importancia de la labor de los Estados Unidos de Norteamerica, durante las últimas seis décadas, en las que según él, se ha garantizado la seguridad mundial mediante la sangre de sus ciudadanos y el poderío de sus armas.


Obama tuvo puntos altos en su discurso tocando temas generales también, pero recurrentemente sobre reconocer la necesidad moral de la guerra, en el cual según mi opinion perdio mucho terreno y credibilidad, hablo también sobre el desarme nuclear algo que en lo personal me parece importante en su plan de gobierno, pero diametralmente opuesto a los valores de los Estados Unidos de América, una potencia que ha prácticamente revitalizado su economía y reinventado su política a base de la guerra, es casi imposible que llegue a suceder un desarme nuclear en el mundo cuando cada nación esta buscando armarse hasta los dientes en caso la diplomacia falle, hasta que no pase un cambio global de pensamiento, no se dejara de usar armas nucleares, porque han probado (adivinen por quienes??) que son armas de destrucción masivas y generadores de devastación.

Me duele inmensamente ser humano en este momento, me duele el hecho de saber que los animales no se matan solo por ego o poder, ellos no tienen noción de estas estupideces, nosotros hemos llegado a la luna, hemos descubierto la cura a casi todas las enfermedades, hemos avanzado años luz en la tecnología, hemos explorado el universo a miles de años luz de nosotros, pero aún no hemos podido aprender a vivir en paz con nuestros hermanos, con nuestros vecinos, con nuestras familias, podemos llegar hasta el borde del universo y hasta el fin de cada galaxia, pero no tardaremos en extinguirnos hasta que aprendamos el verdadero valor de la paz y el respeto.

Todas las buenas causas y buenas intenciones solo necesitan un poco de pasión para poder luchar por ellas, para poder vivir y morir por ellas, con el tiempo estas acciones que solidifiquen ese sueño y encaminen a la política mundial a enmendar las grandes cagadas que hemos hecho con toda nuestra inteligencia humana.

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